“¡Los padres le abandonaron porque nació sin piernas!” Cómo vive la chica conocida en toda la America después de 33 años

A menudo se puede ver cómo las personas se quejan de su vida, pero ni siquiera se da cuenta de lo difícil que puede ser para los demás. Ellos a pesar de todas las dificultades, las superan y alcanzan alturas sin precedentes. La chica Jennifer Bricker es uno de los pocos ejemplos de esas personas. Nació sin pies y eso fue increíble para sus padres.

Sin saber qué hacer, abandonaron a su pequeña Jenny. Pero, afortunadamente, para otra familia su enfermedad no fue un problema tan grande. Por eso, una pareja de Illinois adoptó a una chica y no creián a los médicos que decían que Jennifer no podría sentarse sin la ayuda de alguien. Sus nuevos padres, Sharon y Gerald, no vieron a ella como una persona con limitaciones. Pero no se olvidaron de su enfermedad y buscaban especialistas que pudieran ayudar a su hija. Sharon y Gerald querían hacerle prótesis de piernas, pero después de no acostumbrarse a ellas, Jennifer las abandonó. Sus padres no se enfocaron en el hecho de que Jenny no tenía piernas, y ella creció segura de sí misma e incluso aprendió a moverse sobre sus manos e incluso sobre sus caderas. Era activa cuando era niña y a menudo, jugaba baloncesto y voleibol al aire libre con sus amigos.

Después de un tiempo se interesó por la gimnasia aérea. Le gustaban mucho las campeonas olímpicas Diminica Mochan. Con el tiempo se convirtió en su ídolo. Ella comenzó a repetir los movimientos y aprender poco a poco. Los padres le apoyaron y ella comenzó a hacer gimnasia aérea.

A la edad de 10 años, Jennifer participó en los Juegos Olímpicos y a la edad de 11 años finalmente se convirtió en la campeona estatal. Ella no iba a detenerse. Dominica Mochanu la motivó y ella sintió que había algún tipo de conexión entre ellos.

Luego resultó que el nombre verdadero de Jennifer es Mochanu y Dominica es su hermana. Después de eso eran muy cercano.

Las chicas son de nacionalidad rumana y sus padres son inmigrantes rumanos que huyeron a Estados Unidos en busca de una vida mejor. Los padres de Jenny le dijeron que no se enfadara con sus padres biológicos, porque no se puede saber exactamente qué les había pasado.

Desde que las hermanas se reunieron, Jennifer se ha convertido en una gimnasta exitosa. Tiene su propio canal de YouTube, da conferencias y presentaciones. Dominica está orgullosa de su hermana. Jenny se casó en 2019 y desde entonces vive feliz con su marido.

¡Jennifer Bricker es un ejemplo para muchas personas, que muestran que no hay límites para lograr tus objetivos!